TRISTE POESÍA A UN CORAZÓN HERIDO

Desgarro mi alma en dos,
abro el corazón con más fuerza que nunca,
destrozo los vestigios que lo hacían inquebrantable,
lágrimas de cristal recorren mis venas para cortar
en dos mi sangre y llevarme a morir.
Triste poesía a un corazón herido,
herido por el desengaño y la mentira,
triste poesía que habla de la muerte más cercana,
sé que moriré, no será hoy, ni mañana,
porque quiero vivir, pero el corazón se parte en dos
y no puedo hacer nada para recomponerlo.
Un día amé, como jamás había imaginado,
seguramente volveré a amar,
cubriré de esperanzas y un largo recorrido por la vida
el corazón de alguien que sabrá apaciguar mi llanto,
de esa persona que logrará que olvide todo lo que me ahoga
y me hunde en la desesperación.
Quiero vivir, amando, no deseo morir,
recompondré mi corazón,
volveré a construir al lado de ella el muro de la felicidad,
las lágrimas vertidas en vano se convertirán
en pequeños trozos de vida que veran la luz del Sol,
porque viviré para amar y moriré amando.
Triste poesía de la muerte y la vida,
triste canto al odio y el perdón,
quien sabe cuando podré perdonar,
o cuando veré un despertar sin soledad,
sólo sé que en mis pequeños ratos vacíos
busco la felicidad perdida,
sólo sé que te encontraré,
y no volveré a sufrir una triste despedida.