jueves, 25 de septiembre de 2008

EN LA PENUMBRA DE MI SOLEDAD



En la profundidad de un corazón dormido,
allí donde los sueños se pierden en recuerdos,
en aquel lugar donde la vida no debe callar,
y la palabra tiene que cobrar sentido,
allí se quedó clavada tu imagen para siempre.
Allí guardo un recuerdo que espero volver a encontrar,
porque en la penumbra de mi soledad tu me diste la vida,
me devolviste la ilusión por continuar su largo recorrido,
en ti he puesto mis esperanzas e ilusiones,
ya no tengo que rendirme en mi lucha por seguir aquí,
porque mi lucha ahora es para estar contigo.
Y ese corazón dormido y prácticamente marchito renace,
renace del dolor que lo mataba,
cura sus heridas de guerra en juegos de amor equivocados,
siente de nuevo la alegría por decir sí a la vida,
recobra las energías perdidas y vuelve a sonreír.
Ya no me encuentro solo, triste y hundido,
vuelvo a querer ver de nuevo la luz del Sol,
mi cuarto aún estando vacío por tu ausencia
me habla en silencio de ti,
ya no veo la muerte del alma
ni siento el cuerpo frío e inerte,
tengo motivos para abrir los ojos una vez más.
En la penumbra de mi soledad perdí la ilusión
por todo aquello que antes me importaba,
ahora mi soledad se ha marchado para no volver jamás,
tu me devuelves lo que me habían robado,
yo simplemente busco una razón para que no dejes de ser feliz,
pero si algún día te marchas de mi lado,
volverá a dormir mi corazón,
y allí donde las almas se juntan,
en el lugar al que nunca quiero ir,
tendré que dibujar tu recuerdo,
porque ya nunca podré despertar de mi sueño.

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