DOLOR, INTENSO DOLOR

Y se desgarra el corazón,
se abre en mil pedazos llenos
de pequeños puñales cristalinos que lo matan lentamente,
ahogando lentamente su latido,
para llevarlo a ese último instante,
en el que todo se vuelva oscuro y los ojos al cerrarse
conviertan tu cuerpo en frío y el frío te eleve al cielo.
Y el dolor es grande, intenso dolor,
que resquebraja cada centímetro de mi cuerpo,
aquel que muchas veces luchaba por caminar,
todo lo que soy se convierte en diminuto polvo,
y el viento se lleva el polvo,
para alejarme del camino en el que nunca dejaba de caminar.
Porque antaño caminaba seguro por la vida,
miraba a mi alrededor para ver una realidad siempre soñada,
buscaba entre sueños donde encontrar la felicidad,
felicidad muchas veces truncada,
que empañaba mis ojos de tristeza,
para que intensas lágrimas de desesperación cayeran al suelo.
Y ahora ya no soy feliz, me falta algo,
el dolor agudiza en mi a cada segundo,
intento encontrar un poco de felicidad entre tanta tristeza amarga,
intento recomponer el corazón de su caída mortal,
pero nada es como antes, nada vuelve a tener un principio,
no sé cuanto tiempo durará mi agonía,
solamente sé que algún día tendré que seguir el camino,
en ese camino ir acompañado de la mano del amor,
y en ese camino del amor,
volver a tener la felicidad que nunca me debió faltar.