viernes, 9 de octubre de 2009

EN MI LECHO DE MUERTE



En mi lecho de muerte no quiero lágrimas,
ni pétalos de rosa que recuerden mi existencia,
no quiero gritos amargos de dolor,
ni trozos de hierba seca que recuerden por donde pisé,
solamente quiero elevarme a los cielos recordando aquello me hizo feliz.
Y nadie deberá recordarme por todo aquello que hice,
porque quizás no tuve algo bueno que contar,
mi historia quedará en el olvido porque nada fui,
los pasos que dí serán mi única compañía cuando abandone este mundo,
y todo aquello que haya dejado para el recuerdo,
serán restos de mi humilde y vaga existencia.
Y aquellos que me busquen en sus recuerdos,
encontrarán las palabras que a lo mejor nunca debí darles,
o quizás encuentren entre sus pensamientos palabras que cuenten una historia,
lo importante es que nunca se acuerden de los errores cometidos,
porque a lo mejor yo también me equivoqué en mis actos.
En mi lecho de muerte no quiero promesas incumplidas,
ni personas que nunca estuvieron conmigo,
no quiero la falsedad de quien rompió mi corazón,
ni tampoco la tristeza de quien nunca supo como estar a mi lado,
dejad que mi cuerpo repose en ese último instante en paz,
para elevarme allí donde podré reencontrarme con las almas perdidas.

0 comentarios: