jueves, 6 de noviembre de 2008

ANOCHE TUVE UN SUEÑO DE AMOR



Anoche soñé que paseaba,
un largo paseo por el camino de la esperanza,
recorriendo los rincones ocultos de la vida,
un paseo lento y pausado cogido de la mano del amor,
convertido en una hermosa mujer.
Y el paseo me hacia descubrir sentimientos ocultos,
pasiones desenfrenadas que no llegaba a entender,
luchaba en mi interior por evitar el silencio,
pero me daba cuenta que una simple mirada lo decía todo,
mis ojos brillaban en cada paso recorrido,
y mis manos fuertemente agarraban las de esa hermosa
mujer que me hablaba de amor para que no se apartara de mi lado.
Pero el camino terminó, en ese amargo despertar,
todo se volvió triste, oscuro, vacío,
me reencontraba con esa soledad que ahora me acompaña,
esa hermosa mujer desparecía para convertirse en mi anhelo,
está ahí, en la distancia, separada de mí cada noche,
pero siempre la llevo conmigo en mi maltrecho corazón.
Y veo de nuevo el día,
perdido en mi cuarto buscando un recuerdo de ella,
el único recuerdo son miles de palabras en la ventana de la imaginación,
ese pequeño utensilio de luz que nos acerca cada noche,
no la veo, pero la siento como si estuviera cerca,
no la toco, pero sus caricias imaginarias me hablan de amor.
Anoche tuve un sueño de amor,
sueño de momento inalcanzable por la lejanía,
triste lejanía que me impide abrazarla fuertemente,
robarle un largo y apasionado beso furtivo de amor,
ahora es mi anhelo, mi deseo más ardiente,
espero que muy pronto el deseo sea llama de la pasión,
que cada noche en silencio, mientras nuestros cuerpos se envuelven en el deseo,
me diga que al despertar no volveré a tener otro bonito sueño de amor.

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